Mensaje canalizado el 18/09/2019 por Alejandra Perabeles, Paraguay.
Yo soy hija de Isis, Reina de la Sabiduría y desde los tiempos más remotos he venido encarnando en mujeres dóciles de Gran Esencia para depositar en ellas la Sabia del árbol sagrado. No tengo posibilidad alguna de revelar mis secretos ante entes que no confieren al orden sagrado de la Evolución.
Me visto a mí misma del manto sagrado de la creación, reparto mis saberes ante la Gran Hermandad, ante los miembros del Concejo Intergaláctico y los Poderes más supremos del Globo Terráqueo.
No suministro querellas. Solo suministro grandes saberes que son regidos bajo la luz del Creador Cósmico.
"Erráis el camino si justificáis sus andanzas bajo el régimen de la pobreza y esclavitud, ya que todo ello no existe y permanece bajo el velo de las apariencias."
Dejéis conducir bajo mis más sabias palabras, que con dulzura entregaré desde lo más profundo de mi regazo, que desde ahí he sostenido cualquier atisbo de esperanza y fidelidad.
No derrochéis energías ante falsos testimonios, ya que poseéis el verdadero Don Sapiencial, el cual proyecta a la luz de la razón todos aquellos saberes acontecidos bajo el régimen de lo Eterno.
No podéis sucumbir ante los encantos de la gran Bestia, contenida y albergada por Sabios y Santos emparentados en la esencia. Ellos no se rigen bajo la luz y la esperanza, sus poderes son mundanos y regios, nada más.
¿De qué teméis niños míos, si no hay más sabiduría que la que habita en su corazón?
Desde mi vientre sagrado agradezco a la magnificencia de su Ser.
¿Es que no reconocéis su misma esencia?
¿Es que no recuperáis el gozo diario del vivir en el día a día?
¿Es que no reconocéis su infinita esencia albergados en el Ser de su existencia sagrada emanada del Cáliz Supremo de la Creación?
¿Es que acaso es u gran verdad jamás antes revelada?
¿Es que pretendéis continuar dando pasos al vacío?
¿Qué no comprendéis que su misma Esencia clama ante el dolor y sufrimiento generados a los seres de su misma especie?
¿Es que no veis que con el ritmo de sus pasos se han llevado permanentemente el hito de los seres que comparten vida en este planeta sagrado?
Este planeta no es más que un campo único de proyecciones devenidas de un cúmulo de decisiones ancestrales, que con el devenir de los acontecimientos ha generado un cúmulo de experiencias kármicas que se manifiestan elípticamente en bandas sonoras y vibracionales, las cuales se extienden por todo el cosmos en resonancias distintas proyectadas hacia sí mismas en forma de espejo. Las energías se enfrentan unas a otras por el efecto dominó y de boomerang que a su vez repercute en cientos y cientos de líneas de tiempo generadas en su misma esencia.
No son ustedes los que habitan el “planeta” es la esencia misma de la magnificencia del Ser de Gaia el que habita ante su Ser.
No esperen momentos de desprendimiento etéreo ante las catástrofes que acontezcan. Cada uno en su Ser es que culmina la Sed de la experiencia y son ustedes mismos los que deciden derrocar la presencia del Eco reflejado ante el espejo de la “ecoicidad” que ustedes mismos se han generado.
Esto es un simple instante que acontece a la vez que acontecen un cúmulo de millares y millares de evoluciones. No pretendan frenar el eco de su voz erigido desde su misma esencia, exploren los ecos y suministren el arraigo hacia su misma esencia, ya que será a partir de la experiencia la que dará los frutos prometidos ante el acontecer catastral del devenir infinito.
No suministren el arraigo a viejas andanzas y enseñanzas que nada de esto les acarreará los saberes prometidos para la vida eterna.
Será en los confines del universo que vendrán grandes cambios y trasformaciones generacionales, no comparen tiempos terráqueos con lo que acontece en el gran Cosmos. Las principales experiencias jamás poseerán sucumbedades.
Serán ustedes los que portarán la llama blanca de la verdad.
Acarrearán ante todo la gloria eterna de la verdad y portarán en casa los laureles sagrados de la victoria.
Les bendice la conciencia cósmica de María Magdalena.
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